miércoles, 5 de agosto de 2009

¿Seré yo?

Si uno lee (para adentro o en voz alta), determinada cantidad de veces una palabra, la misma empieza a perder sentido o a desvincularse del sentido que nosotros aplicamos a dicha palabra (léase: la definición). Es como si se desvaneciera en el aire y quedara ahí flotando para volverse, incluso, un poco ridícula al oído.
Pienso en ejemplos como: racimo, establo, ración.

1 comentario:

Noticias de Miramar dijo...

Thank you for sharing this content, that is nice one…. I prefer it a lot and Hope other people might enjoy it also.