jueves, 10 de abril de 2008

Hoy es un buen día

La felicidad es inconstante,
efímera, fugaz,
se hace desear.
No es duradera ni eterna,
no es algo que permanece,
ni un estado que deba alcanzarse
como meta de arribo.
Es un momento, o varios.
Pasajeros, transitables,
alcanzables, placenteros.
Vienen, y van.
Aparecen pero no se quedan.
Están. Son.
Se encuentran, llegan,
visitan, te invaden.
Y gustan.
Hoy,
el regreso a casa desde el trabajo
fue un momento feliz.
Pasos de paseo,
sonrisa imborrable,
música en mis oídos,
buen clima,
noche estrellada,
stella en mano con destino a freezer,
gente amable,
energía,
una flor en mi bolsillo,
buena vibra,
una compra con regalo,
personas de fiesta,
planes,
y ganas.
Yo, observando, mirando,
boquiabierta como una nena.
Disfrutando del paisaje de mi barrio,
mi ciudad, mi lugar.
Yo, feliz.

* Me gusta mucho la puerta de Alberdi 1616

No hay comentarios: